domingo, 25 de septiembre de 2011

Corto de 20 min muy bueno

El circo de la mariposa

Al protagonista ya lo había visto antes, pues da charlas, tiene algún libro y lo último que he visto es que tiene hasta un videoclip donde canta jajaja (y no lo hace mal la verdad). Todo un personaje sin duda y ejemplo que nos debe recordar que siempre hay algo por lo que luchar...

Buen comienzo de semana a todos

miércoles, 14 de septiembre de 2011

El alquimista

Ayer terminé de leerme el libro de Pablo Coehlo. Si bien hay partes con las que no estoy totalmente de acuerdo en los libros de este autor, he de reconocer que siempre se puede sacar algo bueno. Como todo en la vida supongo, donde debemos buscar siempre el lado positivo y lo que aprendemos con cada paso... En este caso, me ha gustado la explicación de lo que significa seguir nuestra leyenda personal. Creo que el libro plasma muy bien la diferencia que existe entre una persona que ha renunciado a sus sueños y aquellas que luchan por acercarse a ellos. El miedo al fracaso o a la decepción frena a mucha gente y la hace esclava del conformismo e una infeliz pero cómoda monotonía. Cierto que nadie dijo que los cambios sean fáciles, que hace falta más energía, pero vale la pena intentarlo. En mi caso me he sentido identificada con todo aquello que significa seguir hacia delante buscando las respuestas que deseamos. Para estar en el camino correcto, uno tiene que aprender a escucharse, a sentir más con el corazón, pues pensar demasiado no es bueno, teniendo la certeza siempre de que uno está haciendo aquello que tiene que hacer. 
A veces la vida nos somete a pruebas, pruebas para comprobar nuestra fe en lo que estamos haciendo, para reafirmar nuestra confianza en los pasos que estamos dando... si tenemos dudas entonces es que no estamos "pensando" con el corazón, sino con la razón... y son más veces las que se equivoca la razón que el corazón...
Buenas noches y buenos sueños.

Jung y la naturaleza animal pagana

 "Las fuerzas instintivas condenadas en el hombre civilizado son mucho más destructivas y por lo tanto más peligrosas que los instintos...