El pasado fin de semana estuve en mi primer retiro espiritual. Era un templo budista de la rama tailandesa llevado por unos 6 monjes que organizan de vez en cuando cursos de meditación. Llegamos el viernes y terminamos el domingo por la tarde. He de decir que el nivel de exigencia no era de principiantes, pues estuvimos con sesiones de hasta casi una hora sentados meditando. A partir del sábado por la tarde empecé a notar molestias en la espalda y tuve que pasarme a la silla. A nivel mental uno vuelve más lúcido, centrado y en paz. Es una oportunidad muy buena para desconectar y encontrar esas respuestas que llevamos dentro. Escuchar el corazón y acallar la mente resulta fácil de decir pero en la práctica cuesta. Entre las conclusiones que he sacado, me quedo con las siguientes notas. Espero que las disfrutéis:
- Yo, mi, a mi….. Cuando centramos nuestro discurso en el yo, siempre decimos lo que pensamos o lo que queremos, el ego es el que quiere ser el centro de atencion. Debemos intentar no estar tan metidos en nuestro propio mundo y tener mas en cuenta a los demas, y lo que hay fuera de nosotros. Porque no estamos solos en este mundo.
- Recta palabra y recto pensamiento : hay que intentar no hablar mal de otras personas, ni de uno mismo. Es mejor dejar libre la interpretación y no emitir juicios de ningun tipo (ni positivos ni negativos). Aceptar y convivir sin tener que estar continuamente evaluando o poniendo etiquetas a nosotros mismos o a los demas.
- Observar sin apego. Por ejemplo cuando practicamos la meditación observando la naturaleza, hay q intentar no formular opiniones de lo vemos o experimentamos.
- Mindfulness. Estar presente en el aquí y el ahora, evitando viajes mentales al pasado y al futuro.
- Luga. Cuando meditamos a veces sentimos dolores o molestias físicas. Nuestra mente se aferra a esa sensación para obligarnos a actuar, a pensar en el dolor y movernos. Si intentamos observar la molestia, aceptando su presencia pero sin dejarnos arrastrar por la sensación, automaticamente el dolor pasa a un segundo plano, se desvanece y podemos seguir meditando.
- Metta-meditación : Se trata de meditar poniendo la respiración en el corazón. Luego observamos que emociones, sentimientos acuden a nuestro corazón. Buscamos a continuación un deseo positivo para depositarlo en nuestro corazón y dejamos que se expanda hacia el universo. Por ultimo buscamos compartir ese deseo con otras personas o simplemente transmitirles compasión, empezando por nosotros mismos, nuestros guías espirituales, seres queridos y tambien aquellos « maestros » que nos han puesto a prueba en la vida.