lunes, 21 de septiembre de 2009

La Asertividad

Hoy vamos a hablar de un término a buen seguro desconocido por muchos y muchas:
Asertividad
Normalmente nadie nos dice cuál es la forma sana de relacionarse con los demás. Somos como somos, con nuestros defectos y nuestras virtudes. Podemos relacionarnos bien o mal, o depende del momento. Pero, ¿alguna vez nos paramos a pensar si nuestro comportamiento es equilibrado? Cierto que los demás deben aceptarnos tal como somos, pero si hacemos algo mal ¿no debemos aprender para no repetirlo? Naturalmente lo más cómodo es decir: "No estoy dispuesto a cambiar", ésta sería una actitud más agresiva; luego está el que piensa "No puedo cambiar aunque quiera", actitud más pasiva. Las dos pueden ser reflejo de inseguridad, de miedo a ser rechazados u otros traumas. Lo lógico, lo razonable, es que si hay defectos en nuestra personalidad que nos llevan a no ser asertivos, primero deberíamos darnos cuenta nosotros mismos, y en caso de no ser así, aceptar las críticas constructivas de nuestros amigos que nos hagan ver que nuestro comportamiento no ha estado bien. Nadie es perfecto y el que lo afirme ya le está faltando una virtud en su lista, la humildad. En mi caso, pues yo no trato de ser perfecta, paso de las utopias, pero si me gusta eso de levantarme por las mañanas y pensar que tengo la oportunidad de ser mejor persona, de equilibrar mis defectos para que no me lleven a comportamientos erróneos. Si todos y todas tratáramos de ser más asertivos en nuestra vida y en nuestras relaciones, creo que nadie saldría perjudicado, más bien todo lo contrario.

2 comentarios:

Adrian Tineo dijo...

El modelo de sabio taoista es, en verdad, asertivo. Dice el capítulo 58 del daodejing:
"De ahí que el sabio sea recto, pero sin herir,
acerado, mas sin pinchar,
franco, mas no desconsiderado,
luz que no deslumbra".

Anónimo dijo...

me voy a tener que leer el librito de marras... de tanto y tanto que hablas bien de él... jejeje

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