viernes, 8 de enero de 2010

Una vez alguien me preguntó...

... ¿se puede estar enamorad@ de dos personas a la vez? La respuesta es que sí, que se puede en tanto que nos enamoramos de aquellas cualidades que admiramos, y en tanto que una sóla persona quizás puede no reunir todo aquello que nos gusta. Entonces, ¿cómo debemos comportarnos? ¿cuál es el sentimiento verdadero? Claramente existen diferentes niveles a la hora de sentir las emociones, por lo que yo votaría por quedarse con la más intensa, pero lo primero es identificar cuánto de verdad hay en lo que vemos en el otr@ y cuánto es idealizado; porque a veces a pesar de no conocer lo suficiente, construímos el resto a nuestro deseo, es decir, en ocasiones vemos en el otr@ lo que anhelamos, la fantasía que queremos ver... Hay que tener cuidado porque cuando el espejismo se borra, nos encontramos con una imagen que no coincide exactamente con lo que habíamos esperado. Por lo tanto, lo primero es dejar a una lado la imaginación, contener la emoción (en la medida de lo posible) lo suficiente para que la razón nos deje extraer información real de la otra persona. ¿Por qué mucha gente se equivoca en la elección de la pareja? Precisamente por esto, porque no se paran a estudiar detenidamente al otro desde una percepción más objetiva, es difícil lo sé... de hecho tampoco tenemos una garantía del 100% de no equivocarse. Así que sí, podemos encontrar en nuestro camino a personas que nos despierten sentimientos (no hablo de una pura atracción física-sexual) incluso teniendo pareja estable, pero hay que valorar muy bien, hacer una comparación lo más minuciosa y distanciada posible para no cometer un error. Y si ya nos equivocamos en el pasado, no hay que tener miedo de reconocerlo y atreverse a cambiar, eso sí, con toda la seguridad que podamos reunir tanto en nosotros mism@s como en el objeto de nuestra supuesta confusión (sea una nueva pareja o no).
Puff, teoría y práctica no siempre van unidas de la mano ... lo sé...

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