sábado, 16 de abril de 2011

El enigma del feedback social

A pesar de que ya me ha ocurrido en varias ocasiones y con diferentes personas, sigo sin encontrar la solución al enigma. Así que os pido colaboración para que me déis otros puntos de vista, de manera que consigua entender por qué ocurre y quizás actuar mejor...
Antecedentes: normalmente sucede con una persona de mi entorno que conozco de hace tiempo, amigo o amiga, con la que he ido teniendo más confianza, me ha ido despertando más cariño y yo me encuentro ya con ganas de que nuestra relación de amistad evolucione y pase de una amistad superficial a algo más verdadero. No hablo de pareja eh? sólo amistades, q nadie se confunda...
Hechos: entonces comienzo a darle señales a la otra persona de que quiero avanzar, la invito a participar más en mis actividades, soy atenta y generosa... y en definitiva doy esas pequeñas muestras de "amor" para indicarle que conmigo puede tener algo más que una relación superficial...
Enigma: La otra persona no reacciona, o no sabe interpretar mis gestos o simplemente no quiere verlos, y encima descubro que el feedback que yo no recibo sí que se lo dá sin reparos a otros y otras. Digamos que yo cuento casi siempre con esa persona y él o ella nunca cuenta conmigo en sus planes, pero con otros sí.

Después de darme cuenta de esta realidad mi cerebro tiene tres reacciones diferentes:
El cerebro reptiliano me dice: "Que fulanit@ se vaya a zurrir mierdas con un látigo, no l@ necesitamos para sobrevivir".
Mi cerebro límbico: "Me siento discriminada, traicionada,... impotente por no conseguir el feedback que otros sí parecen recibir".
Y finalmente el cerebro racional concluye: "¿Por qué esto no funciona?¿Quién tiene la culpa?¿yo o el/la otro/a?¿Debería cambiar de estrategia o simplemente abandonar?¿Cuál es el problema?"

Así que siempre que se me plantea este dilema, y no sé bien cómo actuar, la mayoría de las veces continúo con normalidad pero dejo de invitar o de comunicarme tanto con esa persona porque entiendo que él o ella me sigue viendo como una amiga superficial y nada más, cosa que ya aprovecho para decir desde aquí que no va con mi forma de ser,... yo lo de fingir se lo dejo a hipócritas, mentirosos, actores, actrices y políticos jajaja
Cierto que hay que amar sin pedir nada a cambio, pero tampoco tiene sentido darle un bollo de pan a uno que en vez de comérselo lo va a tirar a la basura en cuanto te des la vuelta... (*) Hay que dar a quien esté preparado para recibir,... lo demás es desperdicio ;P

(*) Con el coraje que me da a mí la gente q tira la comida .... aaayyyyyyyy

6 comentarios:

Leyre dijo...

Supongo que todos nos hemos sentido alguna vez asi...y estoy contigo en que es inutil echar perlas a los cerdos. Estamos en una sociedad de gente sola rodeada de gente por lo que encontrar una personas con la que conectar de forma espiritual es muy dificil. Yo creo que es porque incoscientemente buscamos la aprobación y el cariño de los demás, por eso nos duele tanto cuando nos dan la espalda. Lo mejor seria encontrar ese equilibrio entre lo que nos gustaria y lo que realmente necesitamos.
Por lo que la frase seria:
"No enseñes a cantar a un cerdo, pierdes el tiempo e irritas al cerdo"

Anónimo dijo...

Jajajaja XDDD q buena frase... estoy leyendo un libro que apuesta por la idea de que si das amor, recibes amor, .... pero enfocando los pensamientos adecuadamente, no dando amor a ciegas... A ver si escribo una entradita mañana con... "la primera regla del amor" jajaja La culpa la tiene Romina q me ha prestado el libro :P

Gloria dijo...

¿Por qué buscamos la aprobación/apoyo/reafirmación de los demás? ¿Nos damos a nosotros mismos eso que buscamos fuera? Yo creo que ésa es la clave. Poner expectativas en los demás que son nuestras, de creación propia, es un autoengaño. Dar y recibir, ésa es la fórmula. Si das y no obtienes la respuesta que te gustaría, ¿por qué frustrarse? Si has hecho lo que va contigo, lo que sientes, si estás en paz, entonces estará bien hecho, aunque los demás no lo aprecien. Tal vez comenzarán a hacerlo el día que dejemos de preocuparnos por la respuesta del otro...

Anónimo dijo...

Si Gloria, eso mismo ya me lo han dicho antes, que si mi naturaleza es "dar", entonces que dé, y si llegado a un punto siento que ya no me llena seguir "dando" a esa persona y no recibiendo nada, pues que no se debe continuar por inercia esa relación... supongo que más que frustración es decepción lo que me queda en estos casos...

Unknown dijo...

Es cierto que es frustante no obtener la respuesta que esperabas. Pero lo importante es que tú has dado más que suficiente por tu parte y la frustación solo te hace sentir peor. Da un poco de tiempo a ver si en ese momento la otra parte está en un momento difícil para darse cuenta de lo que está pasando y si no puedes pasar completamente o seguir considerando la amistad como superficial y que no te afecten los resultados.

Unknown dijo...
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